Los ministros de Salud de las Américas respaldaron la Estrategia sobre el consumo de sustancias psicoactivas y la salud pública impulsada por el 50° Consejo Directivo de la OPS, con el fin de hacer frente a los problemas del uso abusivo de drogas y a crear dispositivos que permitan reducir las lagunas en el tratamiento.Los representantes de los países reconocieron que los problemas relacionados con las sustancias son el resultado de una interacción entre la salud y los determinantes sociales, y que para hacer frente a los problemas del uso abusivo es necesario aumentar la protección social, el desarrollo sostenible y el acceso a servicios de salud de buena calidad.

También se comprometieron a promover el acceso universal y equitativo a la asistencia para el tratamiento de los trastornos debidos al consumo de sustancias y la intervención temprana para toda la población, mediante el fortalecimiento de los servicios en el marco de sistemas basados en la atención primaria de salud y redes de servicios integrados y una acción progresiva para eliminar el modelo del pasado centrado en el hospital residencial.