Ginebra, 22 de mayo de 2013 (OPS/OMS) — Los datos en salud deben ser desagregados no sólo por género, sino también de acuerdo a los determinantes sociales, afirmó Carissa F. Etienne, directora de la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud OPS/OMS. De esa manera, añadió, se puede tiene información necesaria para tomar acciones efectivas que reduzcan las inequidades y mejoren la salud de las personas.

"Tenemos que ir más allá de los promedios en los datos, para conocer la verdadera historia de lo que está pasando", dijo Etienne, al participar en encuentro sobre Género, equidad y derechos humanos: desglose de los datos para ver la realidad, organizado por la delegación de Canadá y la OMS.

La directora de la OPS destacó que la región de las Américas es la más desigual del mundo, en tanto persisten grandes disparidades entre y dentro de los países. Los logros en salud alcanzados por la región no están distribuidas equitativamente a lo largo de la población y están determinados socialmente.

Etienne explicó que es necesario saber dónde están las brechas en el acceso a la salud y quiénes quedan marginados. Sin embargo, también se debe conocer por qué están marginados y cómo llegan a marginarse, así como si hay progresos o no. Admitió que no es fácil, en tanto hay "agujeros negros" de información, o muchas veces también hay distintos datos incluso dentro de una misma organización. Bregó por una respuesta integrada e indicadores que puedan identificar esos datos que faltan para adoptar acciones más efectivas.

La OPS/OMS está trabajando en desagregar los datos para poder determinar dónde están las diferencias de acceso a la salud, afirmó. Por esa razón, cada programa de la organización tiene un nivel de evaluación en género, equidad y derechos humanos, añadió.

Por su parte, el subsecretario de Salud de México, Pablo Kuri, señaló que desagregar los datos en salud por género es algo necesario, aunque estuvo de acuerdo en que "no es suficiente" y se requieren otros vinculados a los determinantes de la salud.

Kuri indicó también que otro tema para analizar con los países de la región es cómo generar una base de datos común o una política que establezca cómo comunicar los datos. Comentó que no todos los países manejan los mismos indicadores y sugirió que quizás los Estados Miembros podrían trabajar en elaborar una serie de indicadores comunes.

Todavía queda un largo camino para desagregar los datos en salud, indicó Elissa Golberg, Representante Permanente por Canadá ante las Naciones Unidas en Ginebra. Destacó que la información en salud suele no estar recolectada ni guardada, y afirmó que "desagregar los datos es un factor clave para enfrentar las inequidades en el acceso a la salud".

En la discusión también participaron Flavia Bustero, Subdirectora General de Salud de la Familia, de la Mujer y del Niño de la OMS, y Ties Boerma, Director de Estadísticas de Salud e Informática también de la OMS, quienes compartieron sus perspectivas y experiencias.